La canción no menciona explícitamente la presencia de ejércitos, pero se puede inferir que sin la protección de éstos las empresas que explotan el petróleo no lo podrían hacer. El petróleo, la política y las armas son un negocio de altas ganancias donde todos son accionistas.
La sangre se esparce por el desierto rojo
El crudo es escupido por el desierto negro
Sueño con golpes, con Bush y con Saddam
Sueño con el gas mostaza
Sueño con la Guerra Santa.
Petróleo, petróleo, petróleo,
Petróleo, petróleo, petróleo,
Petróleo y sangre.
Salgo a caminar
Por la ciudad criminal.
Bajo cada traje gris
Sospecho un puñal
Dispuesto a matarme,
Dispuesto a clavarse.
Y yo solo soy un fantasma
Al que todos miran mal.
Amo a Jesús.
Una bandera blanca manchada.
Rojo y negro.
Pozos del infierno.
Petróleo, petróleo, petróleo y sangre.
Petróleo y sangre
En la ciudad criminal.
Petróleo y sangre.
Rojo y negro
El desastre.
Petróleo y sangre
Rojo y negro
El desarme
Hay que decir que el problema fundamental es que el petróleo como recurso natural es no renovable y, por lo tanto, quien lo tiene trata de conservarlo y quien lo necesita trata de obtenerlo. De la misma forma, quien lo tiene y no lo necesita lo cambia por otros productos y servicios como: educación, salud, alimentos, materia prima o apoyo económico.
Las industrias dependen del petróleo para su producción. Una carencia de petróleo conllevaría el cierre de las industrias con consecuencias como desempleo, violencia y hambre. Por esto, la política de las corporaciones prefiere la muerte de militares y civiles en otros países que la mortalidad por violencia y hambruna en el propio país.
El petróleo al no ser renovable genera en los países industrializados una zozobra por la escasez del recurso. Se debe tener el control sobre los yacimientos sin importar a cuántas guerras haya que recurrir o qué pactos corruptos haya que hacer con los gobiernos de los países que los tienen. Las investigaciones sobre el poder de las empresas petroleras en el mundo señalan que existen vínculos entre muchas de ellas y negocios de producción de armamento; igualmente se evidencia cómo estas corporaciones tienen pactos entre sí para controlar los precios internacionales. Porque es claro que cuando se tiene la mercancía, se tiene al mismo tiempo el poder del precio.
Para los países industrializados, las reservas de petróleo ya son insuficientes. De hecho, es necesario encontrar más petróleo, sea donde sea y cueste le que cueste. Aunque el petróleo no es el único generador de guerras, en la actualidad sí es el más importante.
EL PAPEL DE LA OPEP
En este entorno de guerras por el combustible cabe preguntarse qué papel juega la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Pues bien, aunque los miembros de la OPEP son en su mayoría países Árabes, los reales accionistas son las comercializadoras de productos derivados del petróleo de origen Norteamericano y Europeo cuyo objetivo principal es controlar las cuotas mensuales de suministro y por consiguiente el precio, factor principal en la economía de estos países.
Por otra parte, la OPEP surgió para hacerle un contrapeso a la Unión Soviética y al comunismo emergente en el contexto de la guerra fría. En el territorio de la Ex URSS había suficiente petróleo para sustentar su carrera armamentista, mientras Estados Unidos dependía principalmente del petróleo del medio oriente para la operación de sus tanques, aviones, embarcaciones de guerra, etc. Desde el siglo XX el dominio del petróleo ha sido un factor de ventajas sobre eventuales enemigos.
Que se mueran todos los petroleros del mundo.
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